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El cambio climático y sus efectos
son una realidad en Durango: Quiñones

Jesús Francisco Sánchez

El Sol de Durango

Durango, Durango.- El cambio climático y sus efectos son una realidad en Durango: El río Nazas tiene décadas seco, el Tunal cuenta igualmente con bajo nivel y además está muy contaminado, la Laguna de Santiaguillo en Nuevo Ideal está poco a poco secándose, peligrosamente hay una desertificación progresiva de la Sierra Madre Occidental, existe una fuerte y constante erosión con una pérdida de suelo 20 a 40 centímetros como promedio, existe una desaparición de especies de fauna en el Estado y la calidad del aire en las 3 ciudades principales empieza a deteriorarse rápidamente.

El presidente de la Comisión de Ecología del Congreso del Estado, Juan Quiñones Ruiz, tras consignar lo anterior advirtió que si no actuamos con responsabilidad hoy, en menos de 20 años en Durango vamos a tener más calor, más desierto, menos agua, menos alimentos, menos ganado, menos bosques y muchos problemas de salud.

 

"Además de lo anterior -agregó- los expertos en prospectiva climática predicen que de no haber un cambio en la dirección que lleva el desastre ambiental a nivel global y nacional en veinte años Durango sufrirá los estragos del calentamiento global con efectos como la reducción de la superficie boscosa debido a incendios, a la presión poblacional, a la agricultura y a la ganadería", acotó el legislador local.

 

Enlistó consecuencias adicionales como el aumento de la semidesertificación y desertificación en la entidad por una escasez de lluvias y la consiguiente sequía persistente; crítica escasez de agua, que a su vez se reflejará en menor superficie sembrada, menor productividad y producción del campo duranguense, sobre todo de los alimentos básicos: maíz, frijol, chile, soya, sorgo etc.; y disminución de la cría de ganado, por falta de agua para la reproducción de los pastizales y para ingesta del ganado.

 

"Todo lo anterior nos lleva a plantear que en Durango los problemas ambientales amenazan los procesos económicos, la salud de la población, la seguridad local, lo que nos obliga a ampliar y actualizar nuestro marco normativo para que apoye e impulse políticas públicas a nivel estatal, que aborden estos asuntos, desde una perspectiva estratégica y con la participación de todos los sectores", indicó el parlamentario local.

 

Si no actuamos con responsabilidad hoy, en menos de 20 años en Durango vamos a tener más calor, más desierto, menos agua, menos alimentos, menos ganado, menos bosques y muchos problemas de salud.

 

Por ello, hizo un exhorto a las autoridades para que en el ámbito de sus atribuciones se conforme una comisión intersecretarial estatal a favor de la restauración climática, se formen redes ciudadanas sociales, públicas y privadas para crear conciencia y hacer acciones a favor del ambiente, se busque instituir los inspectores ecológicos ciudadanos, en coordinación con el sector educativo formar en Durango un equipo de niños guardianes del planeta.

 

Se pronunció por el establecimiento de un plan estatal de gran visión de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la elaboración de un programa para el uso responsable del automóvil y promover el uso de la bicicleta y el otorgamiento de incentivos y créditos fiscales federales y estatales a las empresas para adquirir tecnología limpia.

 

A nivel empresarial se busque reducir la emisión de contaminantes del aire, agua y suelo, aprovechar otras fuentes de energía con las que contamos en Durango como la solar y la eólica, cuidar de manera responsable el uso agua agrícola, regulando su extracción y revisando los subsidios que recibe.

 

Sugirió en lo domestico reducir el consumo de agua y de energía eléctrica, en el hogar, separar la basura en orgánica e inorgánica y comprar productos que sean reciclables. Reciclar el todo tipo de papel escolar utilizándolo por los dos lados evitándose la tala de árboles. 

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